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Sí, lo sé, la envidia es un deporte de masas.
Más que el fútbol.
Siempre hay alguien más guapo, más listo y con más pelazo que tú, y esto jode.
Es lo que hay, asúmelo, llévalo con dignidad y aprende a que en la vida la mayoría de las veces se pierde.
Siempre podrás utilizar técnicas de psicología inversa para dibujar en la mente de la gente un pelazo tipo Jason Momoa estando completamente calvo y sin injertos ni pelucas.
Bueno, que me desvío.
Hoy no te quiero hablar de la envidia sino de NVIDIA.
Nvidia es una empresa de chips con una carrera alcista imparable gracias al tirón de la Inteligencia Artificial. Su valor en bolsa ha superado el valor de Alphabet (matriz de Google), para que te hagas una idea.
El motivo de su éxito es la gran debilidad de la IA.
Me explico.
La IA no lleva polea.
Imagina subir el nuevo sofá a tu piso de la décima planta con o sin polea.
Con polea o a pelo por las escaleras.
Pues bien, la IA no lleva polea y consume toda la energía a su paso. Para realizar sus cálculos bebe agua sin parar.
Y los de Nvidia, que son gente lista, han hecho del error virtud. Bueno, más bien del error negocio.
Sus chips realizan cálculos técnicos más rápido y con mayor eficiencia energética que el resto y se han convertido en fundamentales para la era actual de la IA generativa.
Ya está, eso es todo.
Aquí Unai,
Te recuerdo que esclavizo Inteligencias Artificiales y me aprovecho de su tontuna para levantar oportunidades de negocio en empresas serias. Me puedes hablar desde AQUÍ
También te tengo que pedir que si algo de lo que te cuento te sirve como inspiración que no te lo quedes para ti y lo compartas con tu gente.