Utilizamos cookies propias y de terceros para realizar estadísticas de uso de la web con la finalidad de identificar fallos y poder mejorar los contenidos y configuración de la página web.
Para más información, visita la Política de cookies.
Bienvenido al McIA: comes hype, cagas frustración
Hace media hora leía a Ibon Orrantia Etxebarria decir algo que me ha hecho clic:
"el concepto de fast food se está imponiendo en el despliegue de la IA".
Y justo es exactamente esto lo que está ocurriendo.
Hoy muchas (demasiadas) empresas consumen IA como si fuera comida rápida:
Demostraciones vistosas, soluciones precocinadas, integraciones exprés… pero sin nutrientes. Sin profundidad. Sin cocina real.
¿y sabes qué pasa? que la mayoría no pasa del piloto.
No lo digo yo, lo dicen estos de aquí abajo que saben de lo que hablan:
* Según la RAND Corporation, más del 80% de los proyectos de IA no llegan a producción.
* Gartner apunta que solo el 48% lo logra, y tarda de media ocho meses en hacerlo.
* MIT Sloan lo resume con crudeza: muchísima prueba, poquísimo impacto.
¿que por qué fracasan?
Porque el menú es atractivo, pero no alimenta.
Casos sin foco.
Datos sin control.
Procesos sin dueños.
Métricas sin sentido.
En ese escenario, hacer bien las cosas ya es, por sí solo, una grandísima ventaja competitiva.
Las pocas empresas que lo hacen con cabeza (priorizando, midiendo, escalando, ...) no solo sacan rendimiento, además, construyen algo que los demás no pueden copiar tan fácilmente.
Y no es una cuestión de tecnología. Es una cuestión de método, de visión y de estructura.
Atento, en las próximas semanas vamos a enviar una carta física (sí, una de verdad, en papel), donde te contaremos cómo NO fracasar con la IA. Qué diferencia a quienes industrializan de verdad frente a quienes se quedan en la foto del prototipo.
Si quieres la carta únicamente te tienes que apuntar aquí
Gracias a Ibon por el empujón conceptual con ese paralelismo tan acertado.